martes, 6 de noviembre de 2007

Globalización

En Dios y el mundo, al ser preguntado por la globalización, el entonces card. Ratzinger opina que constituye un fenómeno empobrecedor que genera insatisfacción: "Si [el ser humano] sólo se une en la superficie, lo profundo que hay en él se rebela contra una uniformidad en la que el individuo se reconoce después como esclavizado."
Explica cómo en la tradición cristiana el Antiguo Testamento se interpreta a la luz del Nuevo y, en particular, el pasaje de Babel tiene un contraste neotestamentario en Pentecostés. En Pentecostés la diversidad de lenguas no impide la unidad profunda, de corazón. "Unidad" es un concepto distinto de "uniformidad".

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